Finalista del IV Concurso Litteratura de Poesía
A Carilda Oliver Labra
siempre
al sur
gotea
la isla
y
una mujer que no se parece a nadie
(sucumbe)
estalla
alcanza
la metáfora inadvertida
la
silueta que va pariendo su dolor extraño
casi
inocente una
es
otra
el
rostro escondido
la
garganta flexible
aquella
imagen de muchacha
con
ese suave rencor que la habita
vive
la historia acumulada
extraña
como cualquier ave exótica
vive
la luz
y
abre las puertas de la casona
y
acaricia los gatos
y
la isla que va en su sangre
y
no escucha
el
teléfono
y
no escucha
los
golpes dados en la gigantesca puerta
sólo
el golpe del piano que suena en su oído
el
poema después del éxtasis.
Al
sur
siempre
al sur
desnuda
muestra
sus senos erguidos
yergue
la palabra
la
dulcísima amapola que no le cantó alguien
vértigo
en mano…
corazón
en mano…
vive
como una más y juega con el viento
atrás
quedan las horas inútiles
los
disparos sutiles
excomulgada
de los simulacros
de los juegos del sexo
al
sur
siempre
al sur
ella,
la mujer desnuda
escribe
los trazos que no le dijo nadie
distanciada
del hombre
suspira
en
su afanosa búsqueda
como
un animal silvestre
suspira.
Yans González García |
Muy buen texto. Imagino un cuaderno con minucias y golosinas como esa. Enhorabuena, hermano.
ResponderEliminar¡¡Muchas gracias de parte del autor, Hojo!!!!
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